El diputado socialcristiano Bienvenido Venegas, representante de la provincia de Puntarenas, había amenazado con apartarse del grupo de 38 diputados favorables al TLC con los Estados Unidos, poniendo en peligro la estrategia del gobierno para cumplir con los requisitos del tratado.
Como condición para volver a poner su voto a disposición del gobierno, pidió algunas cosas. No tardó mucho en recibir la visita del Ministro de la Presidencia, Rodrigo Arias a su despacho en la Asamblea Legislativa.
Como resultado de esa reunión Venegas regresó al G38 y a cambio recibió todo lo que solicitó:
Asfaltado a Monteverde, mantenimiento vial en Puntarenas, varias obras en rutas nacionales, inversión para un aeropuerto en la zona sur, 15 millones de dólares para un acueducto en Esparza, 7.000 millones de colones para alcantarillado, aceras, parques y salones en barrios porteños, readecuación de deudas comunales, garantías para exempleados de INCOP, abaratamiento de combustibles a pescadores, un paseo turístico en Caldera, y reactivación de playa Doña Ana.
Además, el Gobierno se comprometió a explorar con el Banco Mundial la financiación de un programa llamado “Puntarenas Ciudad Puerto”, como en Limón.
Sin embargo, la principal controversia se da por la liberación de la zona protectora de Tivives, lo que implica que ya no habrá restricciones para la construcción de infraestructura por parte de empresarios privados en ese lugar.
Radio 8 de octubre conversó con Carlos Castrillo del Comité Patriótico de Esparza, sobre las consecuencias de este pacto político para la comunidad puntarenense:
Con respecto a las acciones llevadas a cabo por la comunidad para frenar este modelo de desarrollo en la zona, Carlos Castrillo nos dijo lo siguiente:
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